Manifiesto. Benditos maestros
Hola Dimathian@s!!
Este manifiesto es una carta para demostrar mi frustracion e indignación porque creo que son cosas que si no te hablan, al final no cambian y todo sigue igual de mal.
Todos sabéis que soy profesora de Infantil y como tal, me enfrento día a día durante 6 horas seguidas a 25 nenes de entre 3 y 5 años. Es una tarea difícil, porque son pequeños, no son autónomos del todo y porque se les exige mucho nivel educativo y para conseguirlo hay que trabajar duro con ellos, porque están aprendiendo todo en esa edad.
El problema es que mi trabajo no consiste en lidiar 35 horas semanales con esos 25 pequeñines, pues también tengo que lidiar con 50 padres y madres que en ocasiones no están contentos. Es evidente que cada uno se preocupa por lo suyo y por su hijo, pero tiene lógica pensar que un matrimonio tiene a su hijo, solo es 1, por lo tanto, aunque sea rebelde, es "relativamente" fácil de controlar y enseñar unas normas de convivencia. El dilema viene a continuación. Hay algunos padres y madres que creen que no enseñamos bien a sus pequeños o que no los cuidamos bien, pero no comprenden que hay otros 24 compañeros más de los que nos tenemos que ocupar. Otro problema es justificar a los hijos ante cualquier cosa que hagan, pero que cuando se caen solitos o se golpean jugando, porque tienen 3 años y esas cosas pasan, se ponen hechos unas fieras como si hubieramos cometido el mayor pecado capital del mundo.
Aquí es donde quiero manifestar mi malestar y mi frustración. Madres y padres del mundo, comprendo que para cada uno, lo más importante es su hijo o hija, pero en un colegio, la profesora es "madre" de 25 pequeños, no de 1, por lo tanto tenemos que dividirnos para atenderlos a todos. Y lo que hay que entender también es que teniendo 3 años, son niños pequeños que actúan sin pensar y a veces pegan o muerden a los demás porque son niños. También los niños se caen, se golpean, en fin, tienen "accidentillos" propios de su edad. Lo que no me parece moral ni ético es poner el grito en el cielo por cosas que pasan a los peques en esas edades, pero cuando ellos hacen algo a algún amigo, no le den importancia.
Como dice mi abuela "a cada uno le duele lo suyo", pero hay que tener empatía y ponerse en los zapatos de los otros padres, y si a vuestro hijo le han castigado por pegar, lo que tenéis que hacer es pensar cómo se sentirá el nene al que pegó y cómo se sentirán sus padres. Es muy fácil criticar y echar la culpa a los demás, y cuando hacemos algo malo, pensar que no tiene importancia.
Para muestra de cómo son algunos padres, aquí dejo un "contestador de colegio" hecho por lokendo, con el que os vais a reir.
Pero he de reconocer que hay padres que no son así. Hay padres amables, atentos, y que se dan cuenta de que son niños, y los niños se caen, se pegan y a veces tienen que hacer esas cosas para aprender, y que hoy pegaron a su hijo y que tal vez mañana él pegue a un compañero.
Son padres que valoran el esfuerzo que te dicen "qué paciencia tienes, si yo con el mío que es uno y me desespero". O padres que dicen "os merecéis un altar, tenéis ganado el cielo con el trabajo que hacéis y el aguante que tenéis con tantos niños juntos".
Así que quiero dar las gracias a todos esos papás y mamás que siempre son comprensivos, atentos, detallistas y que hacen que recibamos a los peques con una amplia sonrisa, porque sabemos que hacemos un buen trabajo y ellos lo reconocen y lo valoran.
Para finalizar este manifiesto, quiero hacer alusión a todas las personas que dicen eso de "si con los niños pequeños solo se canta y se juega". Hay muchas personas que opinan eso, y no es verdad ni mucho menos. Mis peques de 3 años tienen en cada trimestre unos 6 libros que completar, a parte de unas 50 fotocopias, tienen varias horas de inglés a la semana, gimnasia, informática, religión o valores, aprender a leer y escribir. Y si terminan la tarea del día, se les deja jugar un rato. Ahora pregunto ¿De verdad esas personas siguen pensando que solo se canta y se juega?
Cualquier trabajo tiene su dificultad, sea el que sea, ya sean los madrugones, que hay que hacer muchas tareas, que hay que aguantar a clientes pedantes... en fin, que en cada trabajo podemos ver sus inconvenientes. Así que todos los trabajos son buenos porque tienen algo que nos gusta y sobre todo, lo más importante, porque nos da dinero para vivir y comer.
Valorad los trabajos porque en tiempos de crisis es un bien escaso.
Un saludo
Este manifiesto es una carta para demostrar mi frustracion e indignación porque creo que son cosas que si no te hablan, al final no cambian y todo sigue igual de mal.
Todos sabéis que soy profesora de Infantil y como tal, me enfrento día a día durante 6 horas seguidas a 25 nenes de entre 3 y 5 años. Es una tarea difícil, porque son pequeños, no son autónomos del todo y porque se les exige mucho nivel educativo y para conseguirlo hay que trabajar duro con ellos, porque están aprendiendo todo en esa edad.
El problema es que mi trabajo no consiste en lidiar 35 horas semanales con esos 25 pequeñines, pues también tengo que lidiar con 50 padres y madres que en ocasiones no están contentos. Es evidente que cada uno se preocupa por lo suyo y por su hijo, pero tiene lógica pensar que un matrimonio tiene a su hijo, solo es 1, por lo tanto, aunque sea rebelde, es "relativamente" fácil de controlar y enseñar unas normas de convivencia. El dilema viene a continuación. Hay algunos padres y madres que creen que no enseñamos bien a sus pequeños o que no los cuidamos bien, pero no comprenden que hay otros 24 compañeros más de los que nos tenemos que ocupar. Otro problema es justificar a los hijos ante cualquier cosa que hagan, pero que cuando se caen solitos o se golpean jugando, porque tienen 3 años y esas cosas pasan, se ponen hechos unas fieras como si hubieramos cometido el mayor pecado capital del mundo.
Aquí es donde quiero manifestar mi malestar y mi frustración. Madres y padres del mundo, comprendo que para cada uno, lo más importante es su hijo o hija, pero en un colegio, la profesora es "madre" de 25 pequeños, no de 1, por lo tanto tenemos que dividirnos para atenderlos a todos. Y lo que hay que entender también es que teniendo 3 años, son niños pequeños que actúan sin pensar y a veces pegan o muerden a los demás porque son niños. También los niños se caen, se golpean, en fin, tienen "accidentillos" propios de su edad. Lo que no me parece moral ni ético es poner el grito en el cielo por cosas que pasan a los peques en esas edades, pero cuando ellos hacen algo a algún amigo, no le den importancia.
Como dice mi abuela "a cada uno le duele lo suyo", pero hay que tener empatía y ponerse en los zapatos de los otros padres, y si a vuestro hijo le han castigado por pegar, lo que tenéis que hacer es pensar cómo se sentirá el nene al que pegó y cómo se sentirán sus padres. Es muy fácil criticar y echar la culpa a los demás, y cuando hacemos algo malo, pensar que no tiene importancia.
Para muestra de cómo son algunos padres, aquí dejo un "contestador de colegio" hecho por lokendo, con el que os vais a reir.
Pero he de reconocer que hay padres que no son así. Hay padres amables, atentos, y que se dan cuenta de que son niños, y los niños se caen, se pegan y a veces tienen que hacer esas cosas para aprender, y que hoy pegaron a su hijo y que tal vez mañana él pegue a un compañero.
Son padres que valoran el esfuerzo que te dicen "qué paciencia tienes, si yo con el mío que es uno y me desespero". O padres que dicen "os merecéis un altar, tenéis ganado el cielo con el trabajo que hacéis y el aguante que tenéis con tantos niños juntos".
Así que quiero dar las gracias a todos esos papás y mamás que siempre son comprensivos, atentos, detallistas y que hacen que recibamos a los peques con una amplia sonrisa, porque sabemos que hacemos un buen trabajo y ellos lo reconocen y lo valoran.
Para finalizar este manifiesto, quiero hacer alusión a todas las personas que dicen eso de "si con los niños pequeños solo se canta y se juega". Hay muchas personas que opinan eso, y no es verdad ni mucho menos. Mis peques de 3 años tienen en cada trimestre unos 6 libros que completar, a parte de unas 50 fotocopias, tienen varias horas de inglés a la semana, gimnasia, informática, religión o valores, aprender a leer y escribir. Y si terminan la tarea del día, se les deja jugar un rato. Ahora pregunto ¿De verdad esas personas siguen pensando que solo se canta y se juega?
Cualquier trabajo tiene su dificultad, sea el que sea, ya sean los madrugones, que hay que hacer muchas tareas, que hay que aguantar a clientes pedantes... en fin, que en cada trabajo podemos ver sus inconvenientes. Así que todos los trabajos son buenos porque tienen algo que nos gusta y sobre todo, lo más importante, porque nos da dinero para vivir y comer.
Valorad los trabajos porque en tiempos de crisis es un bien escaso.
Un saludo
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